La alquería de "Askudar" fue una de las más importantes de la antigua comarca del Quempe, dentro del Reino de Granada, hasta que quedó destruida durante la Reconquista cristiana.
Posteriormente fue levantada con el nombre de Santa María de Escúzar por los pobladores castellanos y gallegos que llegaron a partir del siglo XVII. En su honor, aparece su escudo con un castillo de oro —por Castilla— y un cáliz también oro, con la oblea en plata —por Galicia— representándoles.